Propósito: Reportar el uso potencial del entrenamiento visual especializado en sujetos con problemas de calidad visual tras cirugía refractiva corneal. En concreto, utilizamos una innovadora tecnología de entrenamiento visual basada en redes sinusoidales de Gabor, con probada evidencia en el tratamiento de fenómenos disfotópticos asociados a lentes intraoculares multifocales (LIO MF) mediante activación cortical que facilita la neuroadaptación, en un paciente previamente intervenido mediante cirugía refractiva LASIK y una disminución de la calidad de visión asociada a síntomas como el deslumbramiento o los destellos de estrella.
Lugar: Departamento de Oftalmología, Hospital Internacional Vithas Medimar, Alicante, España
Caso clínico: Paciente de 38 años operado con LASIK de miopía y astigmatismo hace unos meses, refiere pérdida de calidad visual, especialmente nocturna, con alta sensibilidad a la luz durante el día y fenómenos disfotópticos como halos, destellos de estrellas y deslumbramientos nocturnos. Es radiólogo. Los datos de refracción subjetiva en nuestro primer examen fueron +0,25 -1,25 a 170º en el ojo derecho (OD) y +0,25 -1,00 a 5º en el ojo izquierdo (OI), con una agudeza visual a distancia corregida (AVCD) de 0,00 logMAR en ambos ojos. Aunque conseguía una agudeza visual óptima con gafas, la sensibilidad al contraste (CS) de lejos (prueba CSV-1000E) y de cerca (prueba OpticTrainCS) estaba reducida. Se probó la adaptación de lentes de contacto esclerales para un mejor control de su perfil de aberración corneal, pero con un impacto mínimo en su sintomatología. Por último, ofrecimos al paciente la posibilidad de utilizar un innovador entrenamiento visual mediante el software OpticTrain® (Proconsi SL, León, España). Este software para facilitar la neuroadaptación se basa en la combinación de redes de Gabor sinusoidales con entornos que favorecen la activación controlada de las áreas cingulada, caudada y fronto-parietal. Se evaluaron los cambios en la CS lejana y cercana, así como en la sintomatología (cuestionario de McAlinden). Después de 3 semanas de entrenamiento, el paciente informó de una mejora subjetiva (menos molestias asociadas a los fenómenos fóticos), con una mejora de la CS de lejos y de cerca (especialmente para frecuencias espaciales altas). Además, la CDVA pasó a ser de -0,1 logMAR en ambos ojos.
Conclusión/Mensaje para llevar a casa: El tratamiento con una nueva tecnología de entrenamiento visual basada en la gamificación se ha mostrado en el caso clínico aquí presentado como una potencial opción terapéutica en un paciente afectado por fenómenos disfotópicos tras cirugía refractiva LASIK. Esta opción terapéutica debe seguir investigándose. Sería recomendable confirmar este aspecto en futuros estudios con tamaños muestrales mayores, incluyendo análisis de resonancia magnética funcional para confirmar la presencia de cambios neurológicos asociados a la neuroadaptación.